Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno de España y ministra del Trabajo, destacó que los dos países abrieron una nueva etapa crucial de relaciones, que tendrá impacto en foros y eventos internacionales.
Al hablar en un desayuno informativo de Nueva Economía Forum en esta capital, la también aspirante presidencial en los comicios generales hacia el fin de año, ponderó la buena sintonía entre las dos administraciones.
«Estamos convencidos de que esta nueva etapa de relaciones entre España y Colombia es crucial en un contexto de incertidumbre global para la construcción de una internacional democrática que debe ser, al mismo tiempo, laboralista», puntualizó la líder del movimiento político Sumar.
En particular, Díaz prometió a Petro, quien concluye hoy su estancia en la nación ibérica, que España mantendrá todos sus esfuerzos para coadyuvar a consolidar la paz en el país cafetero, dentro del compromiso mutuo de multilateralismo democrático con la emergencia ecológica y frente a las desigualdades.
Valoró especialmente la paz como bandera del Gobierno de Petro y la coincidencia con España en este objetivo, así como en avanzar hacia un modelo de energías limpias y renovables.
Petro inició su visita a España el pasado martes y participó en la VI Feria de Servicios para emprendedores colombianos radicados en España.
La feria, que impulsa ProColombia, tiene un recorrido internacional amplio que ya tocó a ciudades como Miami, Nueva York, Panamá, México, Santiago de Chile, Quito, Montreal, Nueva Jersey, Orlando y Madrid, entre otras.
El miércoles, Petro y su esposa fueron recibidos por los reyes de España, y la víspera se entrevistó en el Palacio de la Moncloa con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.
Además, realizó una intervención ante las Cortes Generales (Parlamento), y fue honrado con las Medallas del Congreso y del Senado, de manos de los titulares de ambas cámaras, Meritxel Batet y Ander Gil, respectivamente.
Asimismo, inauguró el Centro Cultural García Márquez y recibió la Medalla de la Universidad de Salamanca, junto con otras condecoraciones, especialmente la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica al mandatario colombiano, su esposa, Verónica del Socorro Alcocer, y al jefe de la diplomacia de Bogotá, Álvaro Leyva.
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