Aguilera mantuvo este fin de semana una reunión con miembros de su cartera, representantes del gremio y expertos para abordar el complejo escenario epidemiológico registrado en el país.
Durante los últimos días una bebé de tres meses falleció al complicarse con una bronquiolitis grave, mientras que el incremento de los menores con problemas respiratorios provocó un alza de la ocupación de camas en los hospitales de hasta el 91 por ciento.
Explicó Aguilera que los niños no tuvieron la oportunidad de tener contacto con este virus, por lo que su inmunidad es muy baja, y esa es la razón del comportamiento más agresivo de la enfermedad.
De acuerdo con la titular, no hay un tratamiento específico para esta afección respiratoria y lo que se puede hacer es cortar la cadena de contagio con el uso de la mascarilla y evitar que los pequeños, particularmente lactantes, estén en lugares de mucha aglomeración.
También recomendó a las personas con síntomas no acercarse a los menores y no enviar a los niños enfermos a las salas cuna, jardines infantiles y escuelas.
Tras el fin del confinamiento por la pandemia y la llegada del invierno, resurgieron estas enfermedades en el país, donde circulan sobre todo el virus sincicial y la influenza. Estos pueden provocar desde cuadros simples, como resfríos, hasta hospitalizaciones por neumonías o bronquitis muy graves.
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