El informe subraya las amenazas inminentes al suministro de alimentos del país, los riesgos asociados con la contaminación del aire y los fenómenos meteorológicos extremos y la posible exacerbación de las desigualdades en salud.
Los impactos potenciales del cambio climático en la salud serán significativos y de amplio alcance, pues la evidencia es más sólida de que los efectos adversos aumentan bajo un clima más cálido, añade el documento.
También expresó su preocupación de que para 2060, Londres podría ser testigo de la transmisión endémica del dengue, mientras el virus chikungunya y el del zika podrían extenderse por toda Inglaterra en las décadas de 2040 y 2050.
El Reino Unido será más adecuado para la supervivencia de vectores de importancia para la salud pública, en particular los mosquitos Aedes albopictus, afirmó.
La misiva también señaló algunos riesgos en escenarios de mayor calentamiento.
Se prevé que el riesgo de inundaciones aumente más pronunciadamente en escenarios de alto calentamiento, y se prevé que el número de personas en el Reino Unido con un riesgo significativo de sufrir inundaciones aumente en un 61 por ciento para 2050.
La subida del nivel del mar es muy sensible al nivel de calentamiento, con una diferencia de aproximadamente un metro entre escenarios de calentamiento bajo y alto, sostuvo.
El informe también indicó que el verano de 2022 batió récords de temperatura a nivel mundial en el Reino Unido, al señalar que durante este período, más de tres mil personas perdieron la vida en Inglaterra y Gales debido al calor.
Predijo que para el año 2030, las muertes relacionadas con el calor en el Reino Unido serán 1,5 veces mayores, y para 2070, serán 12 veces mayores.
También se estimó que la cifra anual de muertes por estas causas en 2050 será de 10 mil personas.
El informe igualmente llamó la atención sobre los riesgos para la salud del cambio climático en relación con la edad.
La trayectoria a largo plazo del cambio climático significa que existen consideraciones intergeneracionales, expresó.
De acuerdo con la agencia, en un escenario optimista de bajo calentamiento, es probable que las temperaturas alcancen su punto máximo a mediados de siglo.
Los adultos en edad laboral actual estarán en sus vulnerables años de jubilación y aquellos que serán adultos entre los años 2050 y 2080 enfrentarán la mayor carga de adaptación, expuso.
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