Activistas locales citados por la televisora de noticias siria Ikhbariya TV, informaron que “un convoy de 50 camiones del ejército estadounidense ingresó en el territorio sirio procedente del norte de Iraq».
Esos refuerzos que incluyen blindados y camiones cisterna se dirigieron hacia la base aérea de Kherab Gheir y otras instalaciones ilegales de Washington al sur de Hasakeh, agregaron.
Por otro lado, el ejército turco sigue enviando material bélico a sus posiciones y a las de los grupos armados que apadrina en el municipio de Ras Al-Ain, ocupado por Ankara en octubre del 2019.
Las fuerzas del ocupante turco enviaron cuatro remolques con cañones a los pueblos de Dawudiah y Aniq Hawa, y esos junto a otro material bélico fueron entregados a agrupaciones radicales locales, divulgó la agencia nacional SANA.
Washington mantiene varias bases en los campos de petróleo y gas en las provincias sirias de Hasakeh y Deir Ezzor, así como patrocina a la milicia separatista Fuerzas Democráticas de Siria FDS, que controla extensas zonas de la región de Al-Jazeera al este del río Éufrates.
A su vez, Ankara ingresó miles de soldados y ocupa amplias zonas de las provincias de Idlib, Alepo, Raqa y Hasakeh, bajo el prtexto de combatir las milicias kurdas.
Damasco denunció repetidamente la presencia ilegal de EE.UU. y Turquía en Siria y la calificó de ocupación, y aseguró que las mismas se verán obligadas a abandonar el país con el aumento de la resistencia popular a las mismas.
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