En una sesión con pocos diputados presentes, ante la limitación de la actividad presencial por la pandemia, la Cámara Baja avaló con 178 votos -de un total de 350- la solicitud del Ejecutivo de coalición progresista de ampliar las medidas para luchar contra la Covid-19.
Por primera vez, el derechista Partido Popular (PP), principal fuerza de la oposición, no respaldó la ampliación de las restricciones a la movilidad de los ciudadanos y se abstuvo en la votación.
El líder del PP volvió a utilizar el debate parlamentario para criticar en duros términos la gestión de la administración central frente a la emergencia sanitaria por el virus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad Covid-19.
A las recriminaciones de los conservadores se sumó la formación de extrema derecha Vox, que una vez más se decantó por rechazar la extensión de la prórroga del estado de alarma, que vencía el venidero sábado.
Para aplazar por cuarta ocasión ese instrumento excepcional, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, necesitaba la autorización del Congreso, según establece la Constitución.
“Ignorar el riesgo de la epidemia y levantar el estado de alarma de manera precipitada sería un error absoluto, total e imperdonable”, advirtió Sánchez en el hemiciclo durante la defensa de su propuesta.
Según su criterio, esa figura constitucional es la única que permite restringir la movilidad de las personas y su extensión responde a la obligación de garantizar una transición gradual a lo que él llama nueva normalidad “lo más prudente posible”.
A su juicio, con el confinamiento de los ciudadanos en sus casas, vigente desde el pasado 14 de marzo, se logró una victoria parcial al doblegar la curva de la pandemia, un resultado que se repetirá si se culmina la desescalada de manera ordenada, enfatizó.
El triunfo definitivo solo llegará con la vacuna o con un tratamiento terapéutico eficaz contra el nuevo coronavirus, aseveró el político socialdemócrata, que gobierna en coalición con la alianza izquierdista Unidos Podemos.
Sánchez acusó al PP y a los partidos que no apoyaron la continuidad del confinamiento de fallar a los españoles y ponerse de perfil en un momento tan crítico para el país como es la lucha contra el patógeno.
“El estado de alarma no forma parte del proyecto político del Gobierno, sino de una necesidad como consecuencia de una emergencia” y la decisión de solicitar una nueva prórroga está basada en la evidencia científica, subrayó.
Necesitamos “limitar unas semanas más” dos derechos fundamentales como el de la libre circulación y el de reunión para garantizar otros dos, el de la salud pública y el de la vida, zanjó el mandatario.
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