De acuerdo con el titular, esa cantidad de infracciones sancionadas se produjo desde el comienzo del desconfinamiento en el país, en mayo.
La utilización de la máscara devino entonces obligación en el transporte público y en algunos espacios cerrados, pero ante el rebrote de la pandemia a finales de julio pasó a ser imperativo en otros escenarios, incluso de manera permanente en ciudades y poblados afectados.
En relación con el valioso medio de protección, la postura del gobierno ha estado marcada por la polémica y las críticas, porque en los primeros meses del azote de la Covid-19 aseguraba que no era necesario más que para los enfermos y el personal de la salud, una posición atribuida a su incapacidad de garantizar el acceso universal.
Al comparecer ante una comisión del Senado encargada de evaluar la gestión frente a la pandemia, Darmanin celebró la actuación de las fuerzas de seguridad desplegadas por Francia en el duro contexto de la enfermedad viral.
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