De acuerdo con el titular, en el regreso a las aulas después de las vacaciones invernales, los alumnos encontrarán pocos cambios en los protocolos sanitarios fijados para frenar la propagación de la Covid-19.
Además del despistaje masivo, el gobierno ajustó la respuesta a la detección en las escuelas de casos de la cepa mutante identificada en el Reino Unido, y en lugar de por un contagio, el cierre de clases será por la presencia de tres.
Sin embargo, bastaría un infectado con las variantes originarias de Sudáfrica y Brasil para tomar esta medida en un aula, explicó Blanquer.
El objetivo es estabilizar las normas en los centros educacionales, aunque resulta inevitable la evolución de las mismas frente a la pandemia, precisó al canal BFM TV.
La prueba de saliva es considerada más aceptable por las personas, en particular los niños, y la prioridad sería la enseñanza primaria.
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