En entrevista con el diario Granma, el titular del grupo empresarial de las Industrias Biotecnológica y Farmacéutica (BioCubaFarma), dijo que los sistemas productivos para cada vacuna son específicos de ellas, no compiten entre sí, y las capacidades con las cuales se cuentan son significativas.
‘A más tardar, en el mes de agosto habremos fabricado las dosis requeridas para inmunizar a toda nuestra población, y luego seguiremos produciéndolas, a fin de suministrarlas a otros países amigos’, aseveró.
Señaló que la estrategia de Cuba para concebir vacunas contra la Covid-19 está basada fundamentalmente en la experiencia biotecnológica del país y las plataformas desarrolladas por el polo científico durante más de 30 años.
También resaltó el desarrollo alcanzado en la isla en investigación y producción de inmunizadores contra otras enfermedades.
Además de ‘la fortaleza del sistema nacional de Salud Pública, disponer de científicos y tecnólogos experimentados y la unidad e integración que han caracterizado a todo el proceso, afirmó.
La estrategia para llegar a cinco candidatos tuvo, como paso inicial, la convocatoria a las instituciones que atesoran larga experiencia en la producción de vacunas, principalmente el Instituto Finlay de Vacunas, líder de Soberana 01, Soberana 02, Soberana Plus; y el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, desarrollador de Mambisa y Abdala.
‘En los inicios tuvimos en idea y diseño más de 40 posibles variantes de candidatos vacunales, a partir de que varios antígenos con distintas fuentes de obtención y diversas formulaciones’, puntualizó.
Martínez explicó que luego de análisis teóricos y evaluaciones definieron como antígeno para utilizar en las vacunas el Dominio de Unión al Receptor (rbd, por sus siglas en inglés) de la proteína de la superficie del virus (proteínas o espiga).
‘Luego decidimos obtener el referido antígeno de dos fuentes diferentes (células de mamíferos y células de levaduras), y concibieron varias formulaciones, utilizando diferentes concentraciones del RBD’, indicó.
También tuvieron en cuenta distintos esquemas de inmunización y dos rutas de administración, intramuscular y nasal.
‘Dentro de la estrategia, hemos tenido en cuenta también la aparición de nuevas variantes del virus, y un grupo de investigadores del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, de la Universidad de Ciencias Informáticas y de BioCubaFarma, estudian y modelan las nuevas mutaciones que aparecen en el mundo’, acotó.
Martínez recalcó que la integración de todos los sistemas ha sido clave en la rápida obtención de tan importantes resultados, a pesar del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos a Cuba y la negación de varios proveedores internacionales de el suministro de materiales y equipos.
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