Según un reporte del Senado sobre el plan de tráfico de personas, las mujeres viajaron con visas de turista de Filipinas a Dubai, donde se les había prometido trabajo.
Luego fueron encerrados en un dormitorio oscuro y sucio y obligadas a dormir en el suelo, señaló la senadora Risa Hontiveros.
De acuerdo con la legisladora, después de que expiraran sus visas de 30 días, se vieron obligadas a ir a Damasco, donde las vendieron a empleadores por hasta 10 mil dólares.
Nuestros oficiales de inmigración parecen estar enviando a nuestras mujeres a la esclavitud, denunció Hontiveros.
Al respecto, el jefe de Inmigración, Jaime Morente, declaró estar ‘decepcionado y frustrado’ por la supuesta participación de su personal en estas nefastas actividades, y añadió que al menos 28 oficiales se encuentran bajo sospecha.
Como ya se demostró en el pasado, no dudaremos en hacerles enfrentar las penas más duras, aseguró.
Morente agregó que más de 112 mil filipinos fueron atrapados tratando de salir del país sin los documentos adecuados entre 2017 y 2020, la mayoría haciéndose pasar por turistas.
En el mismo período, se detectaron mil 70 posibles víctimas de trata de personas.
La pobreza en Filipinas ha llevado durante décadas a sus ciudadanos a buscar trabajos mejor pagados en el extranjero, algunos ilegalmente, para poder enviar dinero a sus familias.
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