En una orden enviada a todas las prefecturas metropolitanas y de ultramar, un documento obtenido por medios de prensa, el funcionario insistió en la aplicación de la medida en los 101 departamentos, y no solo en los 16 que entraron el pasado sábado en un tercer confinamiento, mucho menos restrictivo que los de la primavera y el otoño de 2020.
Según la cadena Franceinfo, la directiva ya había sido emitida el año pasado durante la segunda cuarentena nacional, pero las fuerzas del orden no la aplicaban de forma sistemática.
La indicación no será válida para las reuniones autorizadas, en un contexto cada vez más tenso por el avance de las cepas mutantes del coronavirus SARS-CoV-2, que tienen un impacto en los servicios de cuidados intensivos de los hospitales, donde hasta anoche recibían atención más de cuatro mil 600 pacientes.
La orden de Darmanin es considerada un intento del gobierno de reducir la presencia de aglomeraciones de personas en parques y jardines sin cumplir los gestos barrera y el distanciamiento social.
Los violadores de reglas como el uso de máscaras o evitar las reuniones pueden ser multados con 135 euros, mientras los reincidentes se exponen incluso a seis meses en prisión. El fin de semana disparó las alarmas la realización del carnaval de La Plaine en la sureña ciudad francesa de Marsella, una actividad no declarada con muchos participantes que ignoraron las medidas de distanciación social.
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