En un comunicado difundido este sábado, la Policía Nacional precisó que en la operación, desarrollada de manera conjunta con la Agencia Tributaria, fueron arrestadas 22 personas e intervenidos cuatro mil 450 kilogramos de la citada droga.
Según la fuente, en los numerosos registros realizados en domicilios y naves industriales también se confiscaron 33 mil 735 euros, 10 vehículos, nueve motocicletas, diferentes piezas de joyería y 10 teléfonos móviles, entre otros efectos.
En una de las naves, los agentes localizaron un taller clandestino dedicado a la fabricación de habitáculos ocultos (caletas) en los remolques, donde después escondían y transportaban el hachís y las ganancias económicas procedentes del tráfico de drogas.
La organización delictiva, fuertemente jerarquizada e integrada por miembros de carácter violento, se proveía de la droga en el Campo de Gibraltar (sureña región de Andalucía).
De allí la trasladaban en furgonetas hasta la provincia andaluza de Córdoba, donde poseían toda la infraestructura necesaria para almacenarla y camuflarla.
Finalmente, el hachís era transportado fuera de España en el interior de dobles fondos de camiones de gran tonelaje, agregó el comunicado policial.
Los detenidos adoptaban fuertes medidas de seguridad -tanto en sus desplazamientos como en sus contactos- y utilizaban sofisticados sistemas de encriptación de las telecomunicaciones.
España es uno de los principales puntos de entrada de drogas en Europa, debido a su proximidad con el norte de África, región productora de cannabis, y sus relaciones con Sudamérica, de donde procede la cocaína, recordaron diversos medios periodísticos.
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