En una declaración a Prensa Latina después de las emociones de la presentación en la capital de la provincia autónoma de Vojvodina, el director del grupo, Fernando Sáez Carvajal, expresó complacencia por el éxito y agradecimiento por la calurosa acogida.
Añadió que en el Teatro Nacional Serbio de esa ciudad, segunda en importancia del país, a 95 kilómetros al noroeste de Belgrado, estuvieron cubiertas todas las butacas permitidas debido a la Covid-19 por espectadores visiblemente satisfechos con el programa presentado, a juzgar por sus reacciones.
Una conocedora de este escenario, Aja Jung, directora de Festival de Danza de Belgrado en cuya 18 edición participa Malpaso, le confesó que una ovación como la presenciada anoche, con todos los asistentes puestos de pie, es una imagen poco común en esta ciudad.
El espectáculo consistió en las tres piezas especialmente escogidas para este evento internacional: Vals Indomitable, de Aszure Barton (Canadá); 24 horas y un perro, con coreografía del director artístico del grupo Osnel Delgado y los bailarines, y Tabula rasa, del coreógrafo israelí Ohad Naharin.
Después de 24 horas de viaje para llegar a Belgrado casi a la medianoche del viernes 2 de abril- una verdadera maratón, exclamó Sáez Carvajal-, la compañía actuó en la famosa sala Atelje 212 de la capital al día siguiente, cuando sus 14 integrantes apenas se habían sacudido el polvo del camino, como suele decirse.
Hoy tendrá un día de receso- que no de descanso, pues algo siempre se debe ensayar- y mañana subirá a las tablas en el Centro Cultural de la ciudad de Gornji Milanovac, 120 kilómetros al sur de la capital, para desplegar su depurado arte, con amplio reconocimiento internacional, bajo el lema del festival: La danza vence la pandemia.
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