En una carta enviada al embajador cubano en Francia, Elio Rodríguez, la asociación con seis décadas de labor solidaria recordó la victoria en las arenas de Playa Girón sobre los agresores y afirmó que el sitio del triunfo y aquellas jornadas ocupan un lugar importante en la historia.
Si bien Washington no considera seriamente una nueva invasión, continúan su hostilidad y sus intentos de doblegar a la isla, un pueblo al cual acompañamos fraternalmente con orgullo en su difícil lucha, subrayó.
De acuerdo con la asociación, si en aquellos días los cubanos hubiesen cedido empujados por el miedo y aterrorizados ante la metralla y los cañonazos, la agresión hubiese tenido éxito y ‘Cuba no sería hoy Cuba, al menos la que amamos y nos honra con su amistad’.
Al respecto, rememoró pasajes de los combates y la decisión de la gente humilde de la occidental zona de la Ciénaga de Zapata de defender a su patria con un machete, un fusil o cualquier otra cosa.
Cuando se visita ese lugar, es común encontrar a personas que comentan lo ocurrido en abril de 1961, los bombardeos de aviones estadounidenses B-26 pintados con insignias cubanas, los buques de guerra que ensombrecían el horizonte en Playa Larga y Playa Girón o la llegada de Fidel Castro al teatro de operaciones, señaló.
También cuentan –expuso France Cuba en la misiva- que los invasores eran cubanos traidores y que tras su derrota y rendición, fueron cambiados por alimentos y medicinas.
La organización solidaria rindió homenaje a las decenas de víctimas fatales, entre militares y civiles, de la agresión orquestada por Estados Unidos, a las que calificó de caídas en el campo del honor.
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