En declaraciones a la radioemisora Cadena Ser, la también ministra de Trabajo y Economía Social consideró inasumible el duro ajuste de plantilla anunciado por esas instituciones bancarias.
BBVA, segundo banco de este país europeo, informó la víspera a los sindicatos su intención de suprimir tres mil 800 puestos de trabajo, equivalente a un 16 por ciento de su plantilla.
Esta reestructuración llega en un momento de destrucción de empleos en la banca nacional, apenas tres días después de que el gigante CaixaBank notificara también su pretensión de recortar su plantilla en unos ocho mil 300 efectivos, tras haber absorbido Bankia.
En el caso de CaixaBank, el cual además quiere cerrar mil 534 oficinas, Díaz señaló que le consta que el Gobierno -con una participación en esa entidad- está trabajando para mitigar el proyectado ajuste.
No son los tiempos de estos planteamientos, criticó la titular de la cartera laboral del Ejecutivo de coalición del socialdemócrata Pedro Sánchez, quien gobierna en coalición con la alianza izquierdista Unidas Podemos, a la cual pertenece Díaz.
‘Todo el país, toda Europa está sufriendo y todo el mundo debe de remar en una única dirección que es el mantenimiento del empleo’, añadió.
‘Tenemos más de 3,9 millones de personas en el desempleo, gente que lo está pasando muy mal, pequeñas empresas que lo están pasando muy mal y esto no es lo que necesitamos. Pido que salgamos de la crisis aportando lo mejor de nosotros’, apuntó.
Sobre la propuesta de la vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Nadia Calviño, de revisar los sueldos de los banqueros opinó que se trata de un debate de mucho interés.
Se habla mucho de salarios mínimos y poco de los sueldos de los grandes responsables de la banca, ironizó.
‘Es evidente que hay cifras en las entidades financieras que son bastante llamativas (…) Sería bueno también poner la mirada en esos salarios, que a veces no sabemos ni decir la cifra de lo que perciben’, subrayó.
Además de CaixaBank y BBVA, el Sabadell suprimió más de mil 800 puestos de trabajo a fines de 2020, mientras Santander, principal banco español contando su cartera internacional, anunció el año anterior que quería recortar su plantilla en tres mil 500 trabajadores.
Calviño tachó el miércoles de inaceptables los altos sueldos y los bonos pagados a los directivos de las entidades financieras, que precisamente están recortando personal.
mem/edu