La Italia fascista comenzó la guerra contra Etiopía en octubre de 1935. En 1941, la resistencia organizada por el emperador Haile Selassie desde Sudán, entonces protectorado británico, comenzó una guerra de emancipación que triunfó el 5 de mayo de ese año.
El primer ministro etíope, Abiy Ahmed, y la presidenta, Sahle-Work Zewde, lideran las acciones para conmemorar el también conocido como Día de la Victoria de los Patriotas, organizadas bajo estrictas medidas sanitarias, debido al alto índice de propagación del coronavirus.
Por medio de un comunicado, Ahmed felicitó a todos los etíopes vísperas de la efemérides y los exhortó a aprender de ‘nuestros patriotas’ la importancia de ‘poner al país en primer lugar, cumplir con las responsabilidades y mantener la unidad’.
También evocó la oposición del pueblo al gobierno de Italia, cuyo objetivo era convertir el territorio etíope en su colonia, y resaltó que actualmente la nación necesita contar con la voluntad de todos sus ciudadanos para enfrentar a enemigos externos e internos.
Varias personalidades y políticos del mundo extendieron mensajes de felicitación a propósito de la ocasión, entre ellos el embajador de Rusia en esta capital, Evgeny Terekhin.
Felicito al pueblo de Etiopía por el aniversario 80 de la liberación de la ocupación fascista. Etiopía fue el primer país del mundo en enfrentar la agresión del fascismo en 1935, dijo el embajador Terekhin.
Aquel evento, señaló, profetizó el estallido de la Segunda Guerra Mundial y aunque la declaración de Abisinia como provincia de Italia no fue reconocida por la entonces Liga de Naciones, los invasores permanecieron ilegalmente en suelo africano.
La fuerza de espíritu del pueblo etíope y su deseo de libertad e independencia prevalecieron sobre las aspiraciones colonial-imperiales del agresor, los patriotas obtuvieron una victoria aplastante y la nación se convirtió en el primer país en liberarse del yugo fascista, comentó. mem/raj