Infante aseguró a Prensa Latina que sus orígenes en la pintura comenzaron con el descubrimiento de los acrílicos, la acuarela y el óleo, todos me permitieron cubrir mi preocupación por la factura de mis obras.
Actualmente, el joven artista perfecciona su talento en la Academia San Alejandro, una de las escuelas de bellas artes más antigua y prestigiosa de Cuba y se especializa en la concepción de piezas de gran formato.
Pese a su incipiente carrera, Infante evidencia maestría en sus obras, las cuales difunde a través de plataformas digitales como Instagram en medio de la pandemia mundial que lo mantiene alejado de los grandes salones galéricos.
Allí deja testimonio de sus creaciones que aluden a la calma y la contemplación pasiva del espectador, quien no permanece indiferente a su probada calidad estética en el complejo panorama virtual marcado por las interacciones, likes y menciones.
Destacan sus series paisajísticas Levitaciones y Espejo lunar, ambas esconden significados ocultos que el creador advierte desde su propia concepción, no como un lienzo colgado para ser observado, sino como un espejo, donde se refleja mi imagen y mi entorno inmediato.
Sus musas denotan la pureza del cuerpo femenino desde lo monocromo hasta el color mientras recrea, visualmente, a diosas de las mitologías griega y romana como Afrodita, Selene y Urania.
‘Siempre tuve un gran interés por explorar diferentes técnicas dentro de lo pictórico, me detuve en la abstracción y el paisaje hasta mutar al retrato femenino, la cual ha sido mi principal línea de trabajo y elogio constante a la belleza de la mujer’, sostuvo.
Según la revista española Punto de Fuga, Infante ha insertado una propuesta fresca y prometedora en el nuevo escenario posCovid-19 cuando el arte ha demostrado su valía como poderosa arma de resistencia.
Su proceso creativo distingue por ser detallista y altamente minucioso con trazos que rozan lo onírico y trascienden a lo mundano para insertarse en una realidad otra.
Muchos prefieren el ligero disfrute de la belleza formal ante el paisaje artístico cada vez más elitista e intelectualizado que, en ocasiones, actúa de manera excluyente.
Asociada a las emociones y los estados de la mente, su obra conquistó el gran premio en el Concurso de Artes Plásticas convocado por el Festival Internacional de Circo de la Habana.
Mi reacción ante el tiempo de muerte y enfermedad generado por la Covid-19, he tomado otro camino. Recurro a la paz, la naturaleza, el color, la vida, concluye.
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