Al menos 60 extremistas de esta agrupación inscrita en la lista del terrorismo internacional, fueron trasladados a la base de al-Shadadi donde se entrenan para emplearlos en ataques contras intereses del Estado sirio, informaron activistas locales a la agencia oficial SANA.
Esos radicales, según el medio, fueron sacados de las prisiones controladas por la milicia separatista Fuerzas Democráticas de Siria (FDS), apadrinada por Washington, y el proceso de traslado se efectuó con intensa cobertura de los helicópteros y aviones de reconocimiento.
En abril último, el Pentágono trasladó en helicópteros a un grupo de 50 extremistas al campo petrolero Al-Omar donde Washington estableció una base ahí.
La misión de esos mercenarios se centra en desestabilizar las zonas controladas por el gobierno al atacar puntos del ejército sirio y comunidades civiles, además de proteger las instalaciones petroleras ocupadas por tropas norteamericanas, informó la agencia oficial SANA.
De acuerdo a Damasco, Washington ofrece refugio y protección a los terroristas en sus bases donde los entrena y arma para utilizarlos al servicio de planes desestabilizadores.
Denunció en este sentido que los recientes ataques del Daesh contra militares y civiles en el desierto son planificados y facilitados por las fuerzas estadounidenses que les ofrecen armas e información de inteligencia con el fin de prolongar la guerra en esta nación del Levante.
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