Tal como hiciera hace dos años en la final del certamen celebrado en China, el cuadro norteamericano se repuso de un primer set adverso por 26-28 y ganó los tres siguientes por 25-23, 25-23 y 25-21 para ratificar su dominio universal entre las damas.
El partido que sirvió como colofón a la competición disputada en la costeña localidad de Rimini, en el norte de Italia, vio a la estadounidense Michelle Bartsch-Hackley erigirse como la máxima artillera del duelo con 22 puntos.
A la atacadora auxiliar la escoltó la opuesta Jordan Thompson con 16 unidades para impulsar a su equipo a la segunda victoria sobre las suramericanas luego de la lograda en la ronda clasificatoria.
A la postre, Estados Unidos concretó su hegemonía durante toda la lid, donde solo sufrió un revés y archivó 15 victorias, 14 en la ronda clasificatoria y la de ayer en semifinales por 3-0 ante Turquía.
Precisamente, el seleccionado turco conquistó a primera hora de este viernes la medalla de bronce, tras barrer a Japón con parciales de 25-19, 25-16 y 25-17.
La jugadora más destacada de ese duelo fue Ebrar Karakurt, autora de 29 puntos, de los cuales 24 fueron en ataque, cuatro en la defensa del net y uno en servicio.
Con esta actuación Turquía se confirma en el ‘top cuatro’ de la Liga de Naciones, avalada por el subtítulo en la edición inicial de 2018, el cuarto escaño en 2019 y la medalla de bronce en esta ocasión.
En tanto, Brasil alcanzó su segundo subtítulo luego del cuarto lugar en el que concluyó en la primera versión hace tres años.
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