En el trayecto casi llano de 182,9 kilómetros entre Lorient y Pontivy se impuso su compañero de equipo, el belga Tim Merlier, seguido por el también belga Jasper Philipsen, igualmente del Alpecin-Fenix, y el francés Nacer Bouhanni (Team Arkea-Samsic), mientras van der Poel pasó séptimo la meta y dormirá por segunda jornada consecutiva como puntero.
Varios de los favoritos en la tercera etapa de la 108 edición de la Grande Boucle, todas disputadas hasta ahora en la región de Bretaña, fueron al suelo, entre ellos el australiano Caleb Ewan (Lotto-Soudal) y el eslovaco Peter Sagan (Bora-Hansgrohe).
También el subcampeón del año pasado y uno de los principales aspirantes en el Tour, el esloveno Primoz Roglic (Jumbo-Visma), fue al piso, al igual que el australiano Jack Haig (Team Bahrain Victorious), quien al parecer tendrá que despedirse de la competencia.
Mañana la cuarta etapa se correrá entre Redon y Fougeres, un trayecto de 150,4 kilómetros prácticamente llano, en una nueva oportunidad para los velocistas y la llegada masiva.
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