En el encuentro que tuvo lugar el miércoles participaron el jefe del Ejército nicaragüense, general de ejército Julio César Avilés, y el jefe del Estado Mayor Conjunto de las FAH, general de división Tito Livio Moreno.
La reunión trató sobre el desarrollo de la decimoquinta fase de la Operación Sandino-Morazán en las áreas cercanas a la frontera común.
Ambas fuerzas militares patentizaron la determinación de brindar a los ‘pobladores de las áreas fronterizas las mejores condiciones de seguridad, de estabilidad, de tranquilidad y la paz’ para sus actividades cotidianas.
Además acordaron ampliar los mecanismos de cooperación bilateral ‘en interés de sostener de manera coordinada el enfrentamiento a las amenazas comunes que afectan las áreas fronterizas’.
También se pronunciaron por continuar el intercambio de información e inteligencia en tiempo real.
Entre los principales resultados el Ejército de Nicaragua citó el decomiso de 551.96 kilogramos de cocaína y 88.625 libras de marihuana procesada.
Por su parte, las FAH apuntaron la inhabilitación de una pista de aterrizaje clandestina y la incautación de dos armas de uso civil, una granada PG-7, 66 cartuchos de nueve milímetros, 146 barras de explosivo Emulex y 150 libras de nitrato de amonio.
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