‘La alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos se ha hecho eco del recrudecimiento de la agresión a Cuba y de la hostilidad inescrupulosa desencadenada por el Estado terrorista de Estados Unidos contra el pueblo libre de Cuba’, afirma Barrantes en un artículo divulgado en redes sociales.
Barrantes califica de sintomáticos este exabrupto y las declaraciones temerarias de Bachelet, con las que ahora carga contra la gobernanza legítima de Cuba, faltando a la verdad, a la veracidad de los hechos y a la realidad que se presenta en la vida de la sociedad cubana actual.
‘Esta funcionaria y burócrata de la élite diplomática de ONU ha sido propensa a evadir sus responsabilidades internacionales, a irrespetar la imparcialidad y actuar en desmedro de la objetividad, que le son obligatorias en su alto cargo’, sostiene el analista político.
Llama a recordar sus tímidas, extemporáneas y taimadas declaraciones sobre los acontecimientos de barbarie, salvajismo y represión desproporcionada y criminal contra los levantamientos genuinos y las demandas legítimas de los pueblos de Chile, Colombia, y Bolivia.
Pareciera, denuncia Barrantes, que la señora Bachelet se lava las manos en los casos de gobiernos genuflexos y las oligarquías serviles a los intereses del capital expoliador global y de la política hegemónica de Washington.
Pero, prosigue, ‘se agita para meter sus narices con cinismo y mendacidad proterva en los asuntos de los países libres del dominio imperial, que no aceptan los dictados, presiones, chantajes y resisten con dignidad todas las formas de guerra total, con las que intentan hincarlos y aplastarlos, como la Cuba revolucionaria, la Nicaragua Sandinista, el Estado Plurinacional de Bolivia y la Republica Bolivariana de Venezuela’.
Por todo ello, Barrantes insta a Bachelet a basarse en la verdad a la hora de referirse a la realidad de Cuba y a buscar o investigar el origen real de los acontecimientos que se están viviendo en la tierra de José Martí, Mariana Grajales, Fidel Castro y Antonio Maceo.
Asimismo, le solicita empeñar sus energías valiosas y buenos oficios en hacer cumplir el mandato dado por la Asamblea General de Naciones Unidas, que por 29 veces consecutivas y prácticamente en forma unánime ha exigido a la administración de turno de la Casa Blanca poner fin al genocida, ilegal, unilateral y terrorista bloqueo impuesto por más de 62 años a Cuba y su generoso y lúcido pueblo.
‘Ese sería el papel dado por el mandato de ALTA COMISIONADA PARA LOS DERECHOS HUMANOS DE LA ONU: exigir el cese del bloqueo a Cuba y de la guerra contra el pueblo cubano trabajador y libre’, subraya el analista político.
Exalta que el mejor aporte humanitario al pueblo cubano hoy es contribuir a terminar con el bloqueo criminal de Estados Unidos.
También, indica, favorecer con medidas para agilizar el suministro de los recursos materiales, insumos y reactivos que las ciencias médicas cubanas necesitan para continuar y cumplir felizmente con la aplicación de sus candidatos vacunales -logrados gracias a los avances de su proyecto social- para terminar con la pandemia de Covid-19.
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