El ejecutivo de Marruecos accedió a la información del mandatario galo mediante el proyecto Pegasus, un software israelí que permite hackear teléfonos celulares, según el diario Le Monde.
La noticia provocó malestar entre los políticos locales quienes condenaron ese proceder y lo calificaron de inaceptable.
Durante una rueda de prensa el primer ministro Jean Castex habló sobre una investigación aún en curso sobre el tema, sin ofrecer más detalles.
El jefe de la cartera de Comercio Exterior, Franck Riester, pidió una regulación más estricta del ciberespacio y advirtió que ‘es un desafío para nuestras sociedades democráticas’.
De su lado François de Rugy, ex ministro de Transición Ecológica, publicó en Twitter que llevará el caso a la justicia.
Ambos políticos fueron víctimas de ciberataques del ejecutivo marroquí, según Le Monde.
La víspera el portavoz del gobierno, Gabriel Attal, calificó de impactante las denuncias de espionaje en varios países contra periodistas, ejecutivos gubernamentales y activistas, mediante el programa de vigilancia israelí.
De ser ciertas las denuncias son extremadamente serias, expuso el vocero a la cadena de radio France Info.
Pegasus es un programa de la empresa NSO Group, que Tel Aviv vendió a unos 40 países y que fue revelado días atrás gracias a una investigación periodística multinacional.
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