En un video divulgado en las redes sociales, el mandatario consideró necesario la reactivación de los fármacos, sobre todo en grupos de riesgo, debido a la propagación de variantes más contagiosas del coronavirus SARS-CoV-2.
Con seguridad será requerida una tercera dosis, no para todo el mundo de forma inmediata, pero sí para los más ancianos y frágiles. Por eso nos preparamos, como otros países, señaló.
Según el Ministerio de Salud, en la mayoría de los casos, los inmunógenos aplicados siguen siendo eficaz nueve meses después de la primera inyección, pero su efectividad tiende a disminuir pasado ese tiempo.
Hasta la fecha, el 64,5 por ciento de los ciudadanos franceses recibió al menos una dosis, en tanto el 53 por ciento está completamente vacunado.
Las autoridades sanitarias temen un crecimiento exponencial de los casos y, con ello, la saturación de los servicios médicos.
Esta jornada, el Consejo Constitucional de Francia aprobó la obligatoriedad de poseer un pasaporte o certificado sanitario para acceder a lugares de ocio y otros servicios, medida que genera descontento en algunos sectores de la población.
Además, será exigida la vacunación de todos los trabajadores de la salud.
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