El nombre hace referencia a un popular juego de jóvenes universitarios que consiste en escribir ideas al azar en un papel, mientras lo doblan y pasan entre ellos sin leer las líneas escritas por sus compañeros hasta llegar al final.
La iniciativa, bautizada como Poema Exquisito de Verano,reunió a escritores de las provincias cubanas y representantes de Colombia, Argentina, Ecuador, Uruguay, Chile, Bolivia, Perú, Puerto Rico, Nicaragua, Venezuela, Estados Unidos, México, Italia, los Países Bajos y Alemania.
De acuerdo con los promotores, la acción poética tuvo la intención de incentivar el espíritu colectivo de la creación y reunir a voces distintas en un llamado a ser solidarios y amar para vencer el desasosiego que vive el mundo.
Según explicó el promotor de la idea, Israel Domínguez, los versos estuvieron enfocados en cuatro aspectos fundamentales: azar, diversidad, universalidad y referencia y, a diferencia del juego original, los implicados podían leer lo escrito previamente y redactar su idea relacionada con la temática central.
‘Era una forma de acercar nuestras almas en pos de una creación que transmitiera al público lector un aliento de esperanza, a pesar de los tiempos difíciles y con la idea de que la poesía también es un producto primoroso y placentero’, sentenció.
Los poemas logrados se exhiben en la página oficial de Facebook del Centro Cultural ‘Dulce María Loynaz’, uno de los promotores del juego-poesía junto al Instituto Cubano del Libro, la Casa Iberoamericana de la Décima y la Asociación de Poetas Latinoamericanos.
oda/yrv