Entre los ingredientes para elaborar esas supuestas milagrosas fórmulas para mejorar la estética están la yohimbina y sinefrina, precisa el sitio NaciónFarma.com.
‘Algunos adelgazantes pueden provocar taquicardia, hipertensión y arritmia cardiaca, además de trastornos en la absorción intestinal y en la diuresis, ya que hacen que el cuerpo se acelere de forma poco natural, y pueden provocar hasta un infarto’, alerta la fuente.
La yohimbina es un alcaloide derivado de la corteza del árbol pausinystalia johimbe.
Es además, uno de los principales ingredientes de una serie de fármacos para la disfunción eréctil masculina inducida por los antidepresivos que contienen inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina.
Si se consume en altas dosis puede provocar ataques de pánico, infartos y hasta la muerte.
Otro ingrediente común de los productos adelgazantes es la sinefrina, un componente de la naranja que ocasiona un efecto termogénico cuando se consume en altas dosis.
Los productos con sinefrina ‘pueden resultar altamente peligrosos porque suelen mezclarse con estimulantes que potencian su efecto, como la cafeína, teína, teobromina y la teofilina’, aclara la fuente.
Estos fármacos vendidos como verdaderos milagros para quemar grasas provocan, cuando mucho, la pérdida de no más de un kilogramo cada seis meses, advierten los expertos.
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