En declaraciones a Prensa Latina, Chapman señaló que el Grupo Empresarial de la Industria Ligera (Gempil) de conjunto con universidades del país, y otros entes investigativos y productivos de la isla desarrollan dos programas sectoriales que permiten la interacción y desarrollo entre la ciencia y la industria.
Con carácter sistemático y metas e indicadores definidos, los programas persiguen vincularse directamente con la población, llevarlos al nivel de las tiendas y que el producto se implemente en todo el país, amplió.
En la jornada de hoy en el Palacio de las Convenciones, Gempil realizó la presentación de dos programas sectoriales, Producción y desarrollo de pasta dental con materias primas nacionales y Desarrollo de productos, tecnología y mitigación de impactos ambientales en la Industria Ligera.
Sobre estos, Chapman resaltó la necesidad de garantizar la sostenibilidad e implementación de los resultados obtenidos, no solo desde el punto de vista productivo sino desde el trabajo científico creador, y para ello, se estableció un sistema de gestión con el uso de la ciencia, la tecnología y la innovación.
Es esencial, reiteró, la articulación entre ciencia, industria e informatización, lo cual permite el aprendizaje de todos.
Ya hoy se aprecia un transformación en la búsqueda de cómo lograr los objetivos mediante la integración de los saberes, y asi, y a partir de ese momento empiezan a crecer las ideas para el desarrollo.
La viceprimera ministra ejemplicó que en el proyecto de la pasta dental, existían problemas con los envases, y como solución se encadenaron con el Grupo Empresarial Geocuba que trabajaba de antemano en investigaciones en esa área para solucionar dificultades que afronta el país.
Resultado, se espera que en 2022 comience la producción de los envases para pasta dental celigrafiados lo cual coincidira con el escalado productivo.
Chapman subrayó que el Ministerio de Industrias cambió su estructura organizacional para poder atender estos procesos que vinculado, además, con el consejo técnico asesor que reune a un grupo multidisciplinario con diferentes entidades y universidades que aportan sus experiencia, y donde también se incluye el sector no estatal.
Otro elemento que se tuvo en cuenta fue la memoria histórica que sirvió para rescatar lo bueno que se hacía y no cometer errores anteriores, explicó Chapman a esta agencia.
Todas esas experiencias deben extenderse al resto de los productos de la industria cubana, acompañadas de la preparación de los directivos, funcionarios y trabajadores, y de la comunicación social.
En fin, integración, interoperatividad entre diferentes entidades, sistemáticidad, integrarnos todos, eso es, pensar como país, concluyó.
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