En la más reciente reunión del Consejo de Ministros, el mandatario cubano ponderó los resultados de la campaña de inmunización y la efectividad de las vacunas desarrolladas en la isla las cuales, dijo, comenzaron a aplicarse en condiciones muy difíciles, con una alta circulación de la cepa Delta.
Recordó que en las últimas semanas el país ha mantenido un decrecimiento estable del número de casos diarios, de los fallecidos, de los pacientes ingresados y de los casos activos, y los modelos de pronóstico prevén que en las próximas jornadas bajen de mil los positivos diarios.
De acuerdo con el sitio web de la Presidencia, en el encuentro efectuado el pasado miercoles, Díaz-Canel afirmó que con su probada alta eficacia, las vacunas se han convertido en un sentimiento de orgullo nacional.
Nos han ayudado a llegar a una nueva normalidad que nos permite reactivar ahora nuestra actividad económica, tanto estatal como privada, agregó.
En ese sentido, apuntó que Cuba reactivará la actividad turística y los viajes de los cubanos; y abre las posibilidades de exportar vacunas y servicios, con lo cual se incrementarán los niveles de ingreso al país, después de haber tenido cortadas casi todas las fuentes de financiamiento durante más de un año.
Al referirse a los duros impactos de la crisis económica que vive la nación, a causa de la pandemia, el férreo bloqueo de Estados Unidos e insuficiencias internas, Díaz-Canel mencionó opiniones desfavorables de la población.
Entre las insuficiencias mencionó las motivadas por la inflación, el desabastecimiento en los comercios, el mercado cambiario ilegal de divisas, la persistencia de desigualdades, la difícil situación de las personas jubiladas, la relación salario-precios, y hechos de corrupción, entre otras.
El Consejo de Ministros valoró también en esta ocasión un informe sobre las afectaciones económicas ocasionadas al país por problemas en las operaciones del comercio exterior, tema de constante seguimiento en estas reuniones.
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