En su novena intervención ante el país tras el comienzo de la pandemia en marzo del año pasado, el mandatario no abordó medidas como el reconfinamiento o el toque de queda, pese al deterioro de la situación sanitaria en suelo galo, aunque no al nivel de vecinos como Reino Unido, Alemania, Bélgica y Países Bajos.
De acuerdo con el Jefe de Estado, los mayores de 65 años deben recibir una tercera dosis de las vacunas contra la Covid-19, y de ello dependerá, a partir del 15 de diciembre, la validez de su pase sanitario.
Asimismo, informó que será lanzada el mes próximo una campaña para reforzar la inmunización de las personas de 50 a 64 años.
Macron también señaló que el control del pase sanitario será reforzado en espacios públicos, restaurantes, eventos, instalaciones culturales y deportivas y otros sitios a los que se condiciona el acceso a la presentación del documento que contiene la prueba de una vacunación completa frente a la enfermedad causada por el coronavirus SARS-CoV-2.
Según el presidente francés, es posible lidiar con la situación si “cada uno cumple su papel”, en alusión al respeto a los gestos barrera y al uso de la máscara donde sea requerido.
Más de seis millones de ciudadanos no han recibido ni una dosis de los agentes inmunizantes contra la Covid-19, a quienes el jefe de Estado pidió particular responsabilidad.
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