Por medio de su cuenta oficial en Twitter, el intelectual hizo referencia a un reportaje televisivo, que presentó anoche nuevas pruebas sobre la falta de espontaneidad y autenticidad en la convocatoria lanzada semanas atrás para el próximo lunes y considerada ilícita por las entidades jurídicas de la isla.
De acuerdo con el material, la solicitud para la actividad responde a intereses extranjeros para un cambio de régimen en el país y esa estrategia obedece al guion de golpe de Estado suave, que se intenta aplicar en Cuba siguiendo los parámetros de una presunta lucha no violenta.
Marchar tras ellos es marchar tras los intereses de Estados Unidos, subrayó Prieto.
El audiovisual divulgado en el noticiero estelar mostró imágenes de la visita a La Habana, en 2017, de Ruth Diamint y Laura Tedesco, estudiosas de las Fuerzas Armadas de países latinoamericanos y profesoras de varios cursos para formar actores políticos, entre ellos, algunos de los gestores de la marcha.
Entre 2016 y 2020 ambas académicas organizaron seis encuentros dedicados a la transformación del sistema de un país, en particular en Cuba, y al papel de las Fuerzas Armadas en ese proceso, con especial interés en civiles que puedan influenciar a militares.
Yunior García y Manuel Cuesta, artífices de la convocatoria para un nuevo intento de desestabilización social, estuvieron en algunas de estas iniciativas.
El reporte mostró una hoja de ruta o guía de las politólogas sobre los objetivos que deben perseguir sus alumnos, la cual consideran como un primer borrador para entablar negociaciones con el Gobierno de la isla mayor de las Antillas.
Otras fuentes documentales dieron evidencia sobre cómo estos contrarrevolucionarios también recibieron lecciones de Richard Youngs, experto en protestas públicas como método de cambio político, social y económico.
Por tales motivos, el audiovisual invitó a la población a pensar en los verdaderos intereses tras la marcha anticonstitucional programada para el 15 de noviembre.
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