En conversación con Prensa Latina, la historiadora y sobreviviente de la cruenta dictadura de los Duvalier (François y Jean Claude), señaló que adoptar la fecha del 15 de noviembre, cuando la isla reabre sus puertas a mundo luego de casi dos años de pandemia, no es una casualidad.
“Hay una coincidencia que me llama la atención y no solamente las fechas, sino que desde septiembre hemos visto muchos oficiales norteamericanos que de manera descarada impulsan esta marcha cívica del 15 de noviembre”, dijo la académica.
En esa fecha Cuba reiniciará sus actividades comerciales, turísticas y docentes luego de un duro enfrentamiento a la pandemia de Covid-19, y tras el logro de sus científicos que desarrollaron tres vacunas con las cuales ya se inmunizó el 70 por ciento de la población.
Estos fármacos también se testearon en otros países como Venezuela.
La historiadora insistió que opacar el éxito de la isla ante la pandemia y su regreso a la normalidad es crucial para el discurso que Estados Unidos sostiene hace 60 años.
Para Castor quien vivió los años del régimen duvalierista, que recibió gran apoyo de Washington, la Casa Blanca está adoptando nuevas formas de atacar a Cuba para lograr los mismos objetivos que se impusieron hace más de seis décadas.
“Para mi es un ataque, casi un golpe encubierto que se está haciendo contra Cuba, y naturalmente con esto impiden las protestas que puede provocar un ataque frontal, un ataque militar, o una intervención en Cuba. Esto es una declaración encubierta de otro tipo, para los mismos fines de la desestabilización”, aseguró.
El fin, destacó, es el mismo desde 1959, derrocar al Gobierno de Cuba, lo que cambió fueron las maneras, más atemperadas al siglo XXI, con nuevas tecnologías y medios modernos, acotó.
acl/ane