El periódico La Jornada reseñó el carácter vanguardista y descolonizador del evento, que expande sus asideros y abre puertas a las artes visuales de Asia, África, Medio Oriente, América Latina y el Caribe, a contrapelo de las múltiples acciones de boicot en marcha para frenar su realización.
Nelson Rodríguez, director de la 14 Bienal, precisó en sus declaraciones al diario mexicano que «en Cuba la obra de arte en sí es muy apreciada por la sociedad, por eso la mayor parte de los artistas de la isla están volcados más en crear piezas con una idea de trascendencia o para inmortalizarse», más allá de los fines comerciales.
Según la publicación, la cita que responde al lema Futuro y Contemporaneidad no sólo cuestiona el colonialismo moderno y sus principales consecuencias, también enrumba su eje temático hacia los desafíos del arte en tiempos de crisis.
Fiel a la defensa de la cultura y amistad con Cuba, el rotativo plasmó a doble página la participación de más de 300 curadores, galeristas, críticos y especialistas de Latinoamérica y alabó la novedosa estructura del evento que, por primera vez, desarrolla tres etapas o experiencias artísticas —Preámbulo, La Habana de la Bienal, Regreso al porvenir— a lo largo de seis meses.
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