En representación de asociaciones o a título individual, fijaron postura en defensa de la mayor de las Antillas y su Revolución personas de España, Francia, Irlanda, Italia, Rumanía y Serbia, entre otros países, con una posición de condena a la cruzada de Washington para imponer un cambio de régimen.
La plataforma activada en octubre del año pasado, para aglutinar voces en defensa de Cuba frente al bloqueo y otras agresiones, abordó en su emisión dominical el clima de inestabilidad, violencia y enfrentamiento que pretende crearse por estos días en ciudades del país caribeño con manifestaciones definidas en los manuales de golpe blando y revoluciones de colores.
Para el italiano Michele Mesagna, se trata de la misma contrarrevolución de siempre amparada por gobiernos estadounidenses, con la amplificación esta vez de sus actos en las redes sociales, a partir de mentiras, cuentas falsas y muchas maniobras más.
Por su parte, Phil Kelly, miembro del Foro de Solidaridad con Cuba en Irlanda, aseveró que la isla y su Revolución no están solas en su lucha contra el imperialismo norteamericano, y llamó a respaldarlas en cada lugar donde existan seres humanos que creen en un mundo mejor posible.
Su compatriota Aaron Kelly, del Capítulo Irlandés de la Red en Defensa de la Humanidad, resaltó la solidaridad de la nación caribeña en tiempos de la pandemia de la Covid-19 y rechazó que el gobierno de Estados Unidos intente sacar provecho del complejo panorama causado por la crisis sanitaria para atacar a Cuba.
Desde España, Ana Ruiz en representación de la Plataforma Catalana Defensem Cuba y Manuel Raya, de la Asociación de Amistad con Cuba Bartolomé de las Casas en Sevilla, condenaron el uso de mercenarios en la nueva cruzada y el acoso al Consulado en Barcelona.
El programa fue escenario además de un bonito mensaje de solidaridad de la exgimnasta rumana Silvia Stroescu, campeona olímpica por equipos de Atenas-2004 y mundial de Ghent-2001.
La emisión especial de Europa por Cuba dedicada a repudiar las acciones desestabilizadoras incluyó intervenciones desde la isla y otras partes del planeta más allá del viejo continente.
En ese sentido, divulgó intervenciones de Argentina, Perú y Marruecos, esta última a cargo de Ahmed Laamraoui, secretario general del Sindicato Central de la Unión de Trabajadores de Marruecos, quien afirmó que el único delito de la nación antillana es construir un modelo propio de justicia e inclusión.
jha/wmr