En tribuna antiimperialista instalada en las afueras de la Embajada cubana en Caracas, los asistentes condenaron la campaña de y desinformación en redes sociales y medios de prensa, junto al empleo de agentes internos sometidos a los designios de Washington, para generar un escenario de desestabilización en la isla.
Al respecto, la dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) Tania Díaz alertó sobre la activación de la “canalla mediática, los laboratorios de guerra sucia y la componenda contra los valores y la soberanía de los pueblos para atacar a la hermana Cuba”.
La también diputada a la Asamblea Nacional (Parlamento) calificó de insignificantes estos ataques, comparado con la solidez de la conciencia revolucionaria y la unidad popular existente en la nación caribeña.
“Cuba en la bandera de la dignidad de América”, subrayó la parlamentaria al reiterar el total fracaso de las operaciones de guerra híbrida y psicológica contra la isla.
A su vez, el vicecanciller Rander Peña aseveró que los pueblos cubano y venezolano constituyen la primera reserva moral del mundo; “por eso nos agreden, para tratar de mellar las políticas humanistas y por la defensa de las causas justas”.
El gobierno de Estados Unidos teme que el modelo humanista y socialista impulsado por Cuba y Venezuela pueda propagarse por el mundo, lo cual daría al traste con el modelo corporativo y capitalista imperante, señaló el viceministro de Relaciones Exteriores.
Agregó que miles de personas en todo el mundo levantan hoy las banderas en favor de Cuba, la acompañan los defensores de las causas justas, los movimientos genuinos y los gobiernos que creen en el desarrollo del ser humano y apuestan por la vida.
Al expresar su agradecimiento por las muestras de solidaridad, el embajador de Cuba aquí, Dagoberto Rodríguez, enfatizó que la historia de la Revolución cubana ha sido de lucha permanente frente al imperialismo, el cual ha empleado todos sus instrumentos de agresión para intentar derrotar el proyecto social de la isla caribeña.
Sobre los más recientes planes desestabilizadores promovidos desde Washington, el diplomático aseguró que se intenta manipular la realidad cubana, al presentar como simples opositores a agentes subordinados a un gobierno extranjero, con el fin de impulsar una agenda golpista.
La convocatoria a una supuesta marcha pacífica ha sido apoyada por sectores de una derecha violenta e intervencionista, se trata de una acción desestabilizadora que busca crear las condiciones adecuadas para la intervención de Estados Unidos en los asuntos internos de Cuba, denunció Rodríguez.
Quienes adversan a Cuba -agregó- desconocen hechos de trascendencia registrados en el país, como la proeza de avanzar en la inmunización de la población contra la Covid-19 mediante el empleo de vacunas propias, o el retorno a clases de cientos de miles de niños en un ambiente de paz y seguridad absolutas.
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