En el acto, efectuado en el parque que lleva su nombre frente al Museo Casa Familiar, estuvieron presentes la embajadora de Cuba, Milagros Carina Soto, la gobernadora de la provincia, Angela Yadira Báez; el alcalde de Baní, Santos Ramírez, y el presidente de la Fundación que lleva su nombre, Yván Peña.
Junto a ellos se encontraban autoridades civiles y militares de la ciudad y provincia, así como miembros de la Campaña Dominicana de Solidaridad con Cuba.
También participaron estudiantes de Baní y del Politécnico Máximo Gómez, quienes colocaron ofrendas florales, declamaron poemas y tuvieron emotivas intervenciones alrededor de la fecha.
Varios oradores resaltaron la vida y obra del Generalísimo, el valor de su ejemplo y la significación de la celebración para dominicanos y cubanos pues, como dijo el Héroe Nacional de Cuba, José Martí, al referirse al bravo guerrero, “dominicano de nacimiento, cubano de corazón”.
Y como resumen habló Soto, quien dijo que si llegar a Dominicana es para los cubanos momentos de emoción, llegar a Baní es de enorme significación, y “aunque muchas veces hemos estado aquí, siempre quedamos admirados por todo lo que ustedes hacen por ese héroe compartido”.
Mencionó la amistad entre Gómez y Martí, de la cual manifestó es un símbolo de los lazos que unen a dominicanos y cubanos y en especial a banilejos y cubanos.
“El Generalísimo es para los habitantes de la isla como un padre y un héroe que siempre llevamos en el corazón”, agregó.
El alto jefe militar nació en Baní el 18 de noviembre de 1836, fue uno de los principales oficiales del Ejército Libertador cubano durante la Guerra de los Diez Años y General en Jefe de las tropas revolucionarias en la Guerra de 1895.
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