Informó que en el grupo de edad menor de 60 años, la eficacia del primer componente de Sputnik V supera el 75 por ciento y que contra casos graves y de hospitalización es aún mayor.
La institución señaló que la efectividad del fármaco de una sola dosis frente a la variante Delta supera la de numerosos inmunizantes extranjeros de dos componentes, los cuales muestran una disminución significativa en la eficacia a menos del 50 por ciento cinco meses después de la vacunación.
Los resultados del análisis del impacto de Sputnik Light contra la cepa Delta fueron enviados para su publicación esta semana al portal de manuscritos de artículos científicos en el campo de la medicina MedRxiv.
La vacuna de dos componentes Sputnik V ya está registrada en 70 países, con una población total de más de cuatro mil millones de personas, mientras Sputnik Light fue aprobada en más de 15 naciones y en otras 30 el medicamento está en proceso de registro.
Según Gamaleya, la versión monodosis es una inyección de refuerzo universal para otras vacunas, lo cual ha sido demostrado por los datos positivos de ensayos clínicos en Argentina y otros países, donde evidenció su seguridad y alta inmunogenicidad.
Los desarrolladores de Sputnik Light esperan que su eficacia como refuerzo para otras vacunas frente a la variante Delta será cercana a los índices de Sputnik V: más del 83 por ciento contra la infección y más del 94 por ciento contra la hospitalización.
mem/mml
