El homenaje comenzó con una ofrenda floral ante un cuadro del Comandante en Jefe, pintado por el artista cubano de la plástica Esteban Machado y donada a la embajada de la mayor de las Antillas en esta nación andina.
Seguidamente, los diplomáticos y representantes de las distintas misiones estatales compartieron un comunicado en el cual destacaron el ideario, legado y trayectoria de Fidel Castro como revolucionario, antiimperialista e internacionalista.
«Fidel supo con humildad y honestidad conducir al pueblo cubano sin acudir a recetas neoliberales, ni a políticas de choque por muy difíciles que fueran las circunstancias económicas y enseñó, con su ejemplo, que el interés colectivo está por encima del individual y el deber cumplido debe ser la máxima satisfacción por el bien común», indica el texto.
El encuentro también fue espacio para recordar el profundo humanismo que lo caracterizó, su lucha por un mundo multipolar y la equidad social, así como el impacto de sus ideas en las organizaciones sociales y los pueblos defensores de la justicia y el bienestar, sobre todo, de los más desposeídos.
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