Subrayó el informe de prensa que el evento está concebido como “un espectáculo propagandístico que se supone demuestre un fuerte liderazgo de Estados Unidos donde no existe”.
El gobierno del presidente Joe Biden invitó a 110 «participantes», indicó y precisó que el uso de ese término era necesario ya que no todos son Estados reconocidos internacionalmente.
Biden quería enfadar a China. Por eso incluyó a Taiwán, que no está reconocido como Estado por la Organización de Naciones Unidas ni por Washington, señaló.
La cumbre excluye a países como Hungría, un miembro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y de la Unión Europea, donde, según las encuestas, la oposición está preparada para ganar las elecciones del próximo año.
Turquía, también miembro de la OTAN, quedó fuera de la lista.
Singapur, una democracia y en cierto modo aliada de Estados Unidos, no está en la lista, apuntó la publicación.
Es probable que esto se deba a que su primer ministro, Lee Hsien Loong, rechazó participar en la «coalición de democracias» propuesta por el mandatario norteamericano como una entidad al estilo de la guerra fría dirigida contra China, explicó.
Asimismo, los «enemigos» de Estados Unidos, como Rusia, Venezuela e Irán, no están invitados, por supuesto, a pesar de que celebran regularmente elecciones libres, añade el texto.
La propaganda ni siquiera está dirigida a un público extranjero. Se supone que debe asegurar a Washington que todavía tiene las credenciales que dice tener, remarcó moonofalabama.org.
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