Esas incertidumbres causaron una espiral en los mercados financieros y desde el cobre, el crudo y el algodón se desplomaron los productos básicos.
Las cotizaciones de los metales industriales, incluidos el zinc y el níquel, cayeron más de un tres por ciento en Londres.
Mientras que el petróleo se desplomó por debajo de los 69 dólares el barril, tra iniciar la semana en el entorno de los 80 dólares.
En tanto, el cacao cayó un 4,6 por ciento la jornada anterior tras la reapertura de los mercados estadounidenses después del festivo de Acción de Gracias, asimismo el azúcar, trigo, café y maíz registraron retrocesos.
La nueva variante de coronavirus preocupa a los inversores sobre el resurgimiento de nuevos brotes que descarrilen el crecimiento en las principales economías industriales del mundo.
Acompañadas por las preocupaciones de los científicos quienes estiman que las múltiples mutaciones podrían hacer más ineficaces a las vacunas ante la nueva cepa.
El oro, activo de refugio, oscilaba entre ganancias y pérdidas.
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