Los esfuerzos dan resultado, dijo la funcionaria, citada por la prensa local, en un contexto marcado por la crisis posBrexit que caracteriza a las relaciones entre Francia y Reino Unido, centrado en dos cuestiones fundamentales, la pesca en aguas británicas de embarcaciones galas y la migración en la zona del canal de la Mancha.
Girardin destacó los esfuerzos desarrollados por su país y la Comisión Europea, pero advirtió que aún faltan 111 licencias por lograr.
El combate no ha terminado, subrayó la ministra, tras lo que parece ser un elemento de relajación de las tensiones París-Londres, atizadas por la muerte la semana pasada de casi 30 migrantes en La Mancha, lo cual generó acusaciones mutuas por la tragedia.
La crisis escaló en octubre y noviembre con la denuncia de Francia de la negativa de su vecino a otorgar la mitad de las licencias de pesca, lo que llegó a la colocación sobre la mesa de un paquete de sanciones económicas contra el Reino Unido, iniciativa congelada por el presidente Emmanuel Macron.
El gobierno galo ha insistido en su reclamo a la Unión Europea para que desempeñe un papel más activo en el diferendo con Reino Unido.
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