En sus palabras de agradecimiento, el también intelectual consideró a la mayor isla de las Antillas como su segunda patria y agradeció la posibilidad de apoyar los esfuerzos del país.
“Cuba hace mucho con su ejemplo de resistencia. Ustedes viven en un país que ha desafiado la historia de la humanidad. No es posible derrotar a un pueblo. El socialismo es el nombre político del amor”, subrayó.
Contribuir directamente con la isla es una satisfacción, un privilegio, un honor, y una gracia de Dios, dijo.
Betto convocó a los jóvenes cubanos a apoyar a la nación en la batalla digital.
Se debe ser muy creativo para crear esa trinchera digital revolucionaria dentro y fuera del país, a la luz de los ejemplos de José Martí y Fidel Castro, añadió al respecto.
En la ceremonia, celebrada en el Memorial José Martí, el teólogo inauguró la exposición Guerra y hambre: dos caras de un mismo problema.
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