El cerco estadounidense- que trasciende las fronteras nacionales- es un tema recurrente en las intervenciones de la misión cubana ante Naciones Unidas porque amenaza el desarrollo del país y no hay un área que escape a su impacto, denuncian los diplomáticos de la isla.
Acerca de este mecanismo hostil no solo hablan los representantes cubanos, pues el reclamo por el fin del bloqueo de Estados Unidos de 60 años se reiteró en numerosas ocasiones desde el podio del debate de alto nivel de la Asamblea General de la ONU en su 76 periodo de sesiones, celebrado del 21 al 27 de septiembre.
Durante sus intervenciones en el mayor evento de Naciones Unidas, jefes de Estado y de Gobierno de diversas regiones del mundo demandaron el fin de un mecanismo ampliamente rechazado por la comunidad internacional.
Altos dignatarios de más de 30 naciones pidieron a Washington acabar finalmente con una política que solo causa penurias a la población cubana y en medio de la pandemia de la Covid-19 le impidió acceder a medicamentos, equipos e insumos necesarios, debido al recrudecimiento de es política calificada de criminal.
LATINOAMÉRICA Y EL MUNDO DENUNCIAN EL BLOQUEO
Desde América Latina y el Caribe, los líderes de Costa Rica, Venezuela, Surinam, Bolivia, Jamaica, Belice, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, México, Bahamas, Granada, Dominica, Nicaragua y Trinidad y Tobago coincidieron en su rechazo al mecanismo unilateral.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, en su intervención en video ante el plenario, condenó las sanciones unilaterales que se aplican contra su nación y Cuba.
Venezuela alza su voz con justicia y por humanidad por Cuba, una República y un pueblo heroicos, manifestó el mandatario y recordó las oportunidades que en votación anual, la Asamblea General ha respaldado de forma mayoritaria el fin de esa política estadounidense.
El mandatario de Costa Rica, Carlos Alvarado, pidió igualmente el cese de medidas unilaterales contrarias al derecho internacional que afectan al pueblo cubano.
Por su parte, el presidente de Bolivia, Luis Arce, rechazó en el debate general de ONU “cualquier medida unilateral con objeto de impedir que nuestros países ejerzan su derecho a determinar libremente sus propios sistemas políticos, económicos y sociales”.
El mantenimiento de un mecanismo como el bloqueo a Cuba es un lamentable ejemplo de cómo las decisiones de la Asamblea General son incumplidas por determinados países, recalcó.
Vietnam, Laos, Timor Leste, Islas Salomón, Tuvalu y la República Popular Democrática de Corea también pidieron el fin del cerco estadounidense. Al igual que Rusia, Belarús y Siria.
En tanto, desde África levantaron sus voces en contra del bloqueo representantes de Sudáfrica, Burkina Faso, Namibia, Chad, Gabón, Guinea Ecuatorial, Lesoto, Gambia, Benín, República del Congo y Guinea.
El presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, expresó la solidaridad de su país con el pueblo cubano y pidió el levantamiento del bloqueo, que causa un daño incalculable a la economía y la población de la islã, denunció.
Asimismo, el presidente de Vietnam, Nguyen Xuan Phuc, manifestó que quiso aprovechar su intervención en la Asamblea General para reafirmar el apoyo de de su país a Cuba y pidió el fin del ilegal cerco económico, comercial y financiero de Washington.
VOTACIÓN EN ONU CONTRA EL BLOQUEO
Luego de que se postergara debido a la pandemia de Covid-19, el 23 de junio pasado la Asamblea General volvió a debatir la votación sobre el proyecto de resolución “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”.
Nuevamente, la comunidad internacional reiteró su apoyo a esa isla caribeña y rechazó el cerco que el gobierno estadounidense aún mantiene 60 años después, pese a la oposición de la mayoría de los países miembros de ONU.
En una de las votaciones que mayor consenso logra obtener en Naciones Unidas, la resolución que pide el fin de ese cerco económico, comercial y financiero se adoptó con el respaldo de 184 Estados miembros.
Colombia, Ucrania y Brasil se abstuvieron, y solo votaron en contra Estados Unidos e Israel, para quedar aislados en su empeño de defender un mecanismo que causa penurias económicas a todo un pueblo.
Por vigésimo novena ocasión desde 1992, los países del mundo demandaron en el principal órgano deliberativo de la ONU el levantamiento del bloqueo.
Más de 30 naciones y organizaciones internacionales como el Movimiento de Países No Alineados, el Grupo de los 77 más China y la Comunidad del Caribe denunciaron los daños ocasionados por esa política y exigieron su fin.
Según dijo en esa ocasión a Prensa Latina el representante permanente de Cuba ante Naciones Unidas, Pedro Luis Pedroso, la población de su país se merece el rico debate de cada año en la Asamblea General al abordar el proyecto de resolución que pide el fin del cerco estadounidense.
“Es nuestro pueblo quien más sufre el impacto del bloqueo y de las medidas que lo han recrudecido durante el último año y medio, aun en tiempos de pandemia.”
Por su parte, el portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, afirmó que la resolución que pide ponerle fin refleja el sentimiento abrumador de los Estados miembros.
Además recordó que en el contexto de la pandemia, el titular de Naciones Unidas, António Guterres, animó a levantar sanciones y medidas coercitivas unilaterales impuestas a otros países para facilitar el acceso a suministros de salud, apoyo médico y alimentos, entre otros.
WASHINGTON DE OIDOS SORDOS
Pese a los llamados de las autoridades de la ONU y los reclamos de sus países miembros, Estados Unidos insiste en mantener su política de hostigamiento y sanciones contra Cuba e incluso, las recrudece.
Hasta la fecha, el bloqueo de Washington contra la isla caribeña aparece como el sistema de sanciones unilaterales más injusto, severo y prolongado que se aplica contra nación alguna.
La administración republicana de Donald Trump (2017-2021) identificó a la pandemia como aliada del cerco estadounidense, que incrementó con 60 nuevas sanciones durante la crisis sanitaria, denunció el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, durante a la ONU en Nueva York en septiembre de este año, con motivo del debate general.
Ahora asombra, subrayó em esa ocasión, que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien continúa la aplicación de esas medidas, alegue preocupación por el impacto de la Covid-19 para todos los pueblos.
Desde 2017, Washington recrudeció su bloqueo contra Cuba con la imposición de más de 240 medidas dirigidas a asfixiar la economía de la nación antillana y provocar un cambio de régimen.
Simultáneamente, incremento la hostilidad a través de campañas de desestabilización interna aprovechando la compleja situación económica y social generada por la pandemia.
rmh/ifb
*Periodista de Prensa Latina