Fallecido la víspera a los 82 años de edad, aquejado de varias afecciones de salud, González destacó como segunda y tercera base del mítico equipo de Industriales que ganó cuatro títulos seguidos en el inicio de las Series Nacionales de béisbol en Cuba.
Tras conocer de la defunción, el presidente del Instituto Cubano de Deportes (Inder), Osvaldo Vento, patentizó en la red social Twitter, la inmensa tristeza que sufre la familia del béisbol y del deporte en general.
“Triste noticia para el deporte cubano. Falleció Urbano González, figura emblemática de nuestro béisbol. Condolencias desde el Inder para familiares, amigos y seguidores de ese grande”, suscribió Vento en la red social.
Conocido como el Guajiro de Catalina de Güines, localidad que le vio nacer el 25 de mayo de 1939, González debutó como pelotero a los 17 años con el equipo de Catalina en Liga Nacional Amateur, adscripta a la Unión Atlética Amateurs de Cuba.
Igualmente, participó en las reconocidas ex Ligas de Pedro Betancourt, en Matanzas; la Liga de Quivicán y su similar en La Salud, en la antigua provincia cubana de La Habana, hasta el comienzo de las Series Nacionales, el 14 de enero de 1962.
En esta última fue en la cual más destacó y dejó grabado su nombre con letras de oro, primero con el equipo Occidentales y luego con Industriales, coronándose campeón con uno y otro elenco.
Durante su paso por el béisbol, el Guajiro de Catalina de Güines se adueñó de varios lideratos de bateo, pero la gesta que dejó mayor admiración, es la que le erigió en su momento como el pelotero de mejor vista en la pelota cubana.
De acuerdo con estadísticas de la Federación Cubana, “Urbano” se ponchó solo 67 veces en dos mil 864 veces al bate, para un promedio de un ponche por 47,3 visitas al home plate y 0.08 por encuentros jugados.
Su impresionante vista y excelente tacto, le permite tener el récord de más veces consecutivas al bate sin poncharse (190) o la de mayor cantidad de comparecencias al rectángulo de bateo sin irse por la vía de los strikes, 217.
La calidad de su juego le llevó a vestir la camiseta del equipo Cuba, con el cual se coronó en cuatro Campeonatos Mundiales (1961, 1970, 1971 y 1972), dos Juegos Panamericanos (1963 y 1971) y tres Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe de 1966, 1970 y 1974.
Con el fallecimiento este 4 de diciembre de 2021, el béisbol cubano dice adiós a uno de los exponentes que dieron vida a las Series Nacionales y se encargaron de mantener viva la pasión de la “pelota” aquí, tras la eliminación del profesionalismo.
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