El tema fue abordado este viernes en el espacio Mesa Redonda, de la televisión cubana, en el contexto de la celebración en esta fecha del Día Mundial de los Derechos Humanos, bajo la consigna Todos Humanos, todos iguales.
Para Bárbara Betancourt, directora de política informativa de la Televisión Cubana, la nación caribeña “puede defender su realidad sin complejos” y mostrar sus logros en democracia, sociedad civil y otros temas que el pensamiento hegemónico actual pretende presentar como atributos únicos del capitalismo.
Betancourt aseguró que en Cuba los derechos humanos están centrados en alcanzar una mayor justicia social, siempre con la percepción de que estos son progresivos y por ello existe una voluntad política de avanzar cada vez más en este tema.
Por su parte el periodista español José Manzaneda insistió que al comparar la situación de los derechos humanos en Cuba con la de la mayoría de naciones de América Latina, queda clara la gravedad de las violaciones flagrantes en estas últimas.
A diferencia de esos países, en la isla, ejemplificó, la actual Constitución fue analizada por millones de ciudadanos de los más amplios sectores, previo a su aprobación en referendo.
Es, además, el único país de la región que destina no menos del tres por ciento de su producto interno bruto a la cooperación sur-sur en temas como educación y salud, que forman parte de los derechos humanos básicos, que Cuba no solo cumple, sino que coopera con otras naciones en esa dirección.
Si alguna violación de los derechos humanos existe en Cuba, aseguró el comunicador, es el bloqueo de Washington, que afecta a toda la población.
Para Mabel Ballesteros, presidenta de la Asociación Cubana de Limitados Físicos y Motores, el tema es especialmente sensible en el caso de las personas en esa condición.
Si embargo, advirtió, para las autoridades cubanas no se trata solo en encarar la discapacidad como un tema de salud, sino de derechos humanos bajo la premisa de su incorporación plena a la vida social.
En tanto, Jorge Legañoa, vicepresidente de la Unión de Periodistas de Cuba, aclaró que no existen en el mundo un solo país que pueda mostrar un modelo perfecto de respeto a los derechos humanos, aun cuando el gobierno de Estados Unidos, pretende erigirse como su paladín.
Añadió que Washington con ello busca manipular este sensible asunto para atacar a otros países mediante el impulso de campañas mediáticas, que en el caso específico de Cuba buscan promover la división, victimizar a determinados personajes e invisibilizar la realidad de esta nación.
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