Los fármacos son muy eficaces contra la enfermedad grave, pero por otro lado confirmamos que quienes se inyectaron y luego se expusieron a una infección avanzada desarrollaron una súperinmunidad, aseguró el autor principal, doctor Fikadu Tafesse.
Los anticuerpos medidos en las muestras de sangre de los casos de avance eran más abundantes y mucho más eficaces (hasta un mil por ciento superiores) que los anticuerpos generados tras dos semanas de la segunda dosis de la vacuna de Pfizer, describieron.
Cada exposición posterior a la vacunación sirve en realidad para reforzar la respuesta inmunitaria ante posteriores exposiciones, incluso a nuevas variantes del coronavirus SARS-CoV-2, subrayó el texto divulgado en la revista Journal of the American Medical Association (JAMA)
“Creo que esto habla de un final eventual. No significa que estemos al final de la pandemia, pero señala dónde es probable que lleguemos: una vez que te vacunas y te expones al patógeno, probablemente estarás razonablemente bien protegido de futuras cepas”, reflexionó Marcel Curlin, otro de los implicados.
Nuestra investigación indicó que el resultado a largo plazo va a ser una disminución de la gravedad de la epidemia mundial, remarcó el también profesor de medicina, hasta ahora con experiencia en biológicos contra el VIH.
«No examinamos la variante Ómicrón específicamente, pero los resultados anticipan que las infecciones de esta generarán una respuesta inmunitaria igualmente fuerte entre las personas vacunadas», subrayó Tafesse.
La clave es vacunarse. Hay que tener una base de protección, remarcó, por su parte, Curlin.
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