En su cuenta oficial de Twitter, el mandatario transmitió la congratulación y la gratitud a quienes “consagran sus horas a la noble tarea de enseñar y educar, de preparar a los más nuevos para la vida”.
En otro mensaje en dicha plataforma, enfatizó en que la alfabetización fue «la misión más linda y noble que asumió la juventud cubana».
“Hace 60 años, el 22 de diciembre, fuimos un pueblo más libre, porque fuimos un pueblo más culto”, escribió el jefe de Estado.
La campaña para enseñar a las personas a leer y escribir es considerada toda una epopeya de la naciente Revolución y la participación popular.
Fue la antesala de las transformaciones por las cuales Cuba se pobló de escuelas, institutos, politécnicos, centros para la educación especial, deportiva, pedagógica y universidades.
La cifra de educadores superó los 300 mil con la suma de cuadros dirigentes y trabajadores administrativos.
La tasa de iletrados quedó reducida al 3,9 por ciento de la población total, declarados inalfabetizables por diversas causas, incluidos unos 25 mil residentes haitianos que no dominaban el idioma español.
El 20 de diciembre de 1961 se dio oficialmente por terminada la campaña, que en solo un año benefició a 707 mil personas y ubicó a Cuba entre los países con más bajo índice de analfabetismo en el mundo.
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