Los funcionarios de aduanas explicaron en una conferencia de prensa que inspeccionaron el envío después de sospechar del equipo de entrenamiento de fabricación tailandesa porque no tiene una gran demanda en Australia.
Tras la inspección detectaron más de 190 kilogramos de la droga, también conocida como hielo, que se escondían entre 15 bolsas diferentes.
El superintendente en funciones de la Fuerza Fronteriza Australiana, Joel Carruthers, reconoció que su país consume alrededor de 11 toneladas de metanfetamina por año.
Hay un mercado para ello, e interrumpirlo en el extranjero en países como Tailandia es fantástico, declaró.
Según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, la producción de metanfetamina en el Triángulo Dorado del sudeste asiático, una región fronteriza entre Tailandia, Laos y Myanmar, aumentó considerablemente en los últimos años.
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