Si algo demostró el 2021 con todas las limitaciones impuestas por la pandemia de Covid-19 y el recrudecimiento del bloqueo económico, financiero y comercial impuesto por Estados Unidos, es que las artes visuales en Cuba gozan de una salud envidiable, y que la voluntad creadora de los artistas está fuera de todo cuestionamiento.
El genio creador de los artistas de la plástica y el sustento inestimable de las autoridades culturales de la isla permitieron que el año finalizado mantuviera al magno evento de las artes visuales en Cuba: la Bienal de La Habana.
La cita fue blanco de un intenso ataque por parte de los enemigos de la Revolución cubana, sin embargo, el apoyo convencido de cientos de artistas de todo el mundo mostró la validez de un proyecto que a lo largo de 14 ediciones se ha consolidado como plataforma para la creación artística de vanguardia.
Organizada en tres etapas, todas desde el 12 de noviembre de 2021 hasta el 30 de abril de 2022 bajo el lema Futuro y Contemporaneidad, la Bienal cuenta con la participación de unos 300 creadores nacionales y extranjeros, lo que subraya, en las condiciones antes referidas, la importancia del certamen.
Por otra parte, la situación sanitaria mantuvo cerradas las exposiciones durante casi todo el 2021, lo que obligó a migrar hacia lo virtual.
En ese contexto transcurrió la octava edición de Post-It, encuentro centrado en promover las artes visuales hechas por jóvenes talentos, un espacio necesario para vislumbrar el mapa futuro de la plástica en Cuba.
Con sede en la galería Galiano, la muestra protagonizada por 27 artistas de todo el país propuso pintura, fotografía, escultura, video, instalación, técnica mixta y performance.
RETROSPECTIVAS Y MÁS
Sin embargo, antes de que terminara el año el público tuvo la posibilidad de disfrutar “cara a cara” de las retrospectivas de dos creadores de sumo aporte para la cultura cubana: los premios nacionales de Artes Plásticas Lesbia Vent Dumois (2019) y Rafael Zarza (2020), ambas en el Museo Nacional de Bellas Artes, Edificio Arte Cubano.
La primera expuso su trabajo en Memoria, una muestra antológica en la que repasó seis décadas de trayectoria profesional, sus motivaciones y apuestas por manifestaciones tan diversas como el grabado, la pintura, el dibujo y la escultura.
De Zarza pudimos conocer más en Animales Peligrosos, una exposición de 75 obras que resumieron los múltiples formatos y soportes trabajados por el artista durante sus más de 40 años de carrera.
Mientras en la galería Villa Manuela, de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, el escultor José Villa Soberón (Premio Nacional de Artes Plásticas 2008) presentó la muestra La espiral eterna, continuidad de una serie que inició hace 13 años.
La espiral… agrupó igual cantidad de piezas de pequeño y medio formato que aluden, de una u otra forma, a la composición homónima del maestro Leo Brouwer.
El Consejo Nacional de las Artes Plásticas entregó su principal lauro de la especialidad correspondiente al 2021 al artista Alberto Lescay, reconocido dentro y fuera de Cuba por sus esculturas monumentales.
Lescay es autor de emblemáticas obras como el complejo arquitectónico Plaza de la Revolución Antonio Maceo, y los monumentos al Cimarrón y el dedicado a la Madre de la Patria Mariana Grajales, entre otros.
Por último, en el año sobresale la muestra de colografías de la pintora y grabadora Belkis Ayón (1967-1999) que acogió el Museo Centro Reina Sofía, en Madrid, España, sin dudas un importante reconocimiento a la obra de una de las artistas cubanas más destacadas de las últimas décadas.
arb/ypp
(*) Periodista de la Redacción Cultura de Prensa Latina
