El Ministerio de Transporte indicó que era necesaria la medida para frenar la propagación y evitar que el sistema de salud se vea abrumado.
La prohibición se aplica a la región de la capital, donde han surgido la mayoría de los casos nuevos, pero ha enfrentado una fuerte oposición de la comisión de derechos humanos del país, que la calificó de restrictiva y discriminatoria.
Filipinas ha vacunado completamente a cerca de la mitad de sus 110 millones de habitantes.
Aunque casi todos los capitalinos fueron vacunados, las autoridades dicen que allí hay muchos inmigrantes no registrados, además de niños y ancianos que no han sido inyectados.
Este viernes Filipinas impuso otro récord de nuevas infecciones (37 mil 207), por quinta vez en dos semanas.
Hasta el momento, más de tres millones de personas se han infectado y más de 53 mil han muerto a causa de la Covid-19 en el país asiático.
La prohibición de transporte sigue a una amenaza la semana pasada del presidente Rodrigo Duterte de arrestar a las personas no vacunadas.
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