Representantes de la embajada cubana en Costa Rica, del Comité Costarricense de Solidaridad con Cuba y del Círculo Bolivariano Yamilet López colocaron sendas coronas y ramos de rosas blancas colocaron ante el busto del Apóstol de la Independencia de Cuba de España en el capitalino Parque Nacional, con un aforo reducido por la pandemia de Covid-19.
Juan Mesa, presidente de la Asociación Cultural de Cubanos Residentes en Costa Rica Antonio Maceo, resaltó que Martí constituyó una guía en la lucha independentista contra el colonialismo español, y destacó que su legado e ideario viven en el proceso revolucionario iniciado el 1 de enero de 1959.
Por su parte, la segunda secretaria de la embajada de Cuba en Costa Rica, Maday Traba, exaltó la frase martiana «si hay algo sagrado en cuanto alumbra al sol, son los intereses patrios» y subrayó que el Apóstol cubano nos señala el camino del deber y no de qué lado se vive mejor.
Señaló que como cada año, hoy se reúnen frente a su busto en esta capital para rendirle tributo en el aniversario 169 de su natalicio al más universal de todos los cubanos, y también al estratega político y al excepcional patriota.
Tras indicar que fue el primero en vislumbrar el peligro hegemonista de Estados Unidos respecto a nuestra América y el primero también en delinear una política unitaria para enfrentar esa expansión, Traba exaltó que esa unidad como premisa fue adoptada por nuestro Comandante en Jefe Fidel Castro y continúa hoy vigente, como faro que guía a la Revolución.
«Estos dos años de lucha contra la Covid-19 y de intentos de desestabilización del orden interno en Cuba -auspiciados y dirigidos por el imperialismo, que implementa contra la isla, además de un férreo bloqueo económico por más de 60 años, una guerra no convencional de cuarta generación- han demostrado una vez más que en la unión está la fuerza», subrayó.
Refirió que en su largo peregrinar por este continente como parte de aquella ardua labor de unir voluntades para la independencia de su amada isla y como Delegado del Partido Revolucionario Cubano que había fundado en 1892, Martí vino dos veces a Costa Rica, en 1893 y 1894, para integrar al general Antonio Maceo en esos proyectos.
La diplomática cubana sostuvo que al homenajear a Martí rinden tributo también «a su más cabal discípulo, al invicto Comandante en Jefe, aquel que nos enseñó a vencer, mediante una estrategia de masas que nadie podrá ya detener en la isla caribeña».
mem/ale
