Después de meses en los que el Partido Socialista del primer ministro Antonio Costa parecía favorito, aunque sin la mayoría necesaria en el parlamento de 230 bancas, las últimas encuestas arrojaban empate técnico y le daban esperanzas a unos maltrechos socialdemócratas con el veterano Rui Rio a la cabeza.
Incluso se habla de pacto de caballeros entre socialistas, que llevan a Costa, y socialdemócratas (centroderecha) para buscar gobernabilidad si no se forman las alianzas de izquierda o de derechas esperadas.
Más allá de quién se alce con el puesto, al escogido le espera superar la actual ola de la Covid-19, que tiene a más de un millón de confinados después de reportarse durante varios días cifras de nuevos enfermos cercanas a las 65 mil personas.
Desde el comienzo de la pandemia, en la nación ibérica se contagiaron más de 2,5 millones de personas, y de ellos, murieron casi 19 mil 800.
Las autoridades electorales exhortaron a votar al temer una amplia abstención, que se calcula en 11 por ciento del padrón.
El propio presidente Marcelo Rebelo de Sousa reiteró las particularidades de estos comicios, tal como hizo desde septiembre del año pasado cuando aseguró que de no aprobarse el plan de presupuesto de 2022 disolvería el legislativo.
«Sé que pandemia, cansancio, conformismo y otras razones del foro íntimo son, para muchos, argumentos para elegir no elegir. Pero en estas elecciones tan diferentes, en un tiempo tan diferente y exigente, votar es también una manera de decir que estamos vivos», expuso en un mensaje televisado en la víspera electoral.
De Sousa exhortó a votar sin temores en unas elecciones que precederán a años decisivos para el país, con la salida de la pandemia y la reconstrucción social y económica, marcados también por desafíos europeos y tensión internacional.
Como marca la ley, los 21 candidatos guardaron silencio la víspera durante la jornada de reflexión previa.
Varios analistas temen que el abstencionismo sea el gran ganador de la jornada al recordar que en la anterior cita (2019) la cifra rondó el 51 por ciento del electorado.
Hace un año, en enero de 2021, durante las presidenciales fue del 60 por ciento, pero el país estaba confinado y de Sousa se reeligió sin sorpresas.
mem/ro